La llegada de la pandemia ha hecho que los docentes adopten nuevas herramientas y/o desempolvar otras ya existentes con el fin de continuar el proceso de enseñanza en el contexto actual. Un tipo de aprendizaje que puede ser utilizado en la actualidad es el inmersivo, ya que permite a los estudiantes involucrarse completamente en un entorno digital interactivo, ofreciendo a los estudiantes, la posibilidad de sumergirse por completo en el aprendizaje, de manera que se sienta como si estuviera en un entorno real. Este tipo de aprendizaje ocurre en un mundo virtual (visual y auditivo), lo que permite que nuestro cerebro funcione como si realmente se sumergiera en un nuevo entorno real. Según algunos estudios, este método de aprendizaje tiene un porcentaje de retención de conocimiento del 90%, mientras que el resto de los formatos
tradicionales es de entre 10 y 20%, puede resultar una excelente estrategia de aprendizaje, ya que ayuda a lograr el dominio de un comportamiento, técnica o metodología, mediante ensayos guiados tantas veces como sea necesario.

En los métodos de aprendizaje actuales los estudiantes no están desarrollando competencias ya que la enseñanza está enfocada únicamente en compartir conocimiento, en cambio, el aprendizaje inmersivo propone crear un nuevo espacio educativo, que brinde nuevas experiencias de aprendizaje, mediante el uso de nuevas tecnologías como la realidad virtual y aumentada, que posibilita interactuar con los contenidos. Mejor dicho, aprender mediante tecnología inmersiva que promete potencializar la concentración, asimilación y aplicación
de los contenidos estudiados, por medio de experiencias prácticas. La principal característica de todo aprendizaje inmersivo es poder manipular objetos en un entorno virtual sin correr riegos al manipularlos, los cuales podría correr en un entorno real.

Publicado: 2021-12-02

Número completo